En España Urbanismo impulsa cooperativas en Las Rehoyas

En noviembre empieza un curso para formar a los vecinos en la creación de miniempresas sociales que atiendan las demandas del barrio. La Concejalía de Urbanismo impulsará la creación de cooperativas sociales en el barrio de Las Rehoyas que promuevan el autoempleo y presten aquellos servicios que necesita el barrio, como el mantenimiento de edificios y zonas…

En noviembre empieza un curso para formar a los vecinos en la creación de miniempresas sociales que atiendan las demandas del barrio.

La Concejalía de Urbanismo impulsará la creación de cooperativas sociales en el barrio de Las Rehoyas que promuevan el autoempleo y presten aquellos servicios que necesita el barrio, como el mantenimiento de edificios y zonas comunes o la atención a las personas mayores, entre otros. El primer paso de este proyecto, con el que se intenta responder a una de las demandas de la Plataforma Rehoyas-Arapiles que ha planteado reiteradas veces la puesta en marcha de medidas que permitan mejorar la vida económica y social del barrio, es enseñar a crear una cooperativa.

Las Rehoyas, que está pendiente de que el próximo año arran que la reconstrucción del barrio, soporta una de las mayores tasas de paro del municipio. Un 36,24% de los residentes se encontraba en paro en 2012, un porcentaje que se eleva al 41,59%, según el estudio sociológico elaborado en 2017 por las empresas Agora Integral y El Caballero de París. Al elevado desempleo se une la falta de formación. El 55% de los vecinos tiene solo la Educación Primaria. Casi la mitad de la población es pensionista y el 22,7% vive solo.

«No nos sirve de nada rehabilitar las viviendas del barrio si la gente que vive en esas casas tiene malas condiciones de vida. Lo único que cambia es que en lugar de vivir en 47 metros cuadrados, lo harán en 67 metros cuadrados», sostiene Javier Doreste, concejal de Urbanismo, quien opina que la formación en la creación de cooperativas es una forma de intentar dar respuestas a uno de los mayores problemas que soporta el barrio: el paro. «Queremos pasar de políticas asistenciales a políticas activas, tanto sociales como de empleo; que a la larga la gente se empodere, con el apoyo del Ayuntamiento», indica.

La iniciativa comenzará el próximo mes con un curso gratuito y homologado de 30 horas de duración, en el que se ofrecen 30 plazas, a los que estén interesados. Jacinto Ortega, asesor de Urbanismo e impulsor y coordinador del proyecto, señala que el curso de formación de cooperativistas estará dirigido por la Confederación Española de Cooperativistas de Trabajo Social (Coceta) y la Asociación de Economía Social de Canarias. El curso enseña como se crea una cooperativa social y Coceta se encarga además, gratuitamente, de hacer el seguimiento de las nuevas cooperativas y de redactar los estatutos sociales, pedir la certificación del nombre y de otros trámites administrativos, como dar de alta la actividad.

Se trata, dijo Doreste, de crear un tejido cooperativista que al mismo tiempo mejore las condiciones de estos trabajadores y atienda las demandas del barrio, como el mantenimiento de edificios, de los viejos y también de los que se levanten en la nueva urbanización de Las Rehoyas; la atención a los jardines y a las zonas comunes, así como la asistencia a personas mayores.

El proyecto, que se quiere extender a otros barrios, fue presentado a los vecinos el pasado mes de septiembre, durante la reunión de la última comisión de seguimiento de la reposición del barrio.

«Hay que dar un impulso a la gente para que se ponga en marcha y tome sus propias decisiones. Si se logra crear un pequeño grupo de cooperativistas, pueden mantener el barrio hasta que se empiece a tirar. Y en los edificios nuevos, pueden conveniar con las comunidades de propietarios el mantenimiento de los inmuebles y la limpieza de las zonas comunes», explica Doreste. Si la experiencia funciona, añade, se podrían ofrecer servicios a otras urbanizaciones de la zona, como Copherfam o Divina Pastora. La posibilidad de servicios que se pueden ofrecer es infinita, desde la creación de ludotecas, hasta la elaboración y reparto de comidas a domicilio, tiendas de productos ecológicos, etc. «El objetivo es que salgan de la situación en que están. Que sean ellos los que transformen su vida», destaca Ortega.

Fuente: Laprovicia.es